Sexto interludio: cuarto aniversario, y llueve sobre mojado

¡Cuatro años de blog! ¡Pero si todo esto empezó medio de cachondeo, oiga! ¿Cómo es que esta birriosidad de blog sigue en marcha?

¡Pues lo cierto es que yo tampoco lo comprendo! Así que voy a dedicar esta cumpleañosa entrada al sesudo y pormenorizado análisis de los motivos por los que este blog se sigue publicando.


1.- Como cualquier planta en una zona lluviosa, crece verde y robusto.

Porque, si en algo ha destacado este año, ha sido en las copiosas jarretadas de agua que la retorcida climatología ha tenido a bien arrojar sobre nuestras cabezas en casi todos los eventos de recreación a los que hemos asistido.

Vale que en Madrid, zona tradicionalmente seca y soleada, este año empezó a llover en Octubre, y aún estamos esperando a ver si para. Pero es que por ahí, y, muy especialmente, en Peracense, nos ha caído lo que no está escrito. Perdón, sí que está escrito.

Al fondo se ve nuestra tienda nueva, recién estrenada, justo antes de derrumbarse sobre el rojizo barro de Peracense. Y sí, ese tipo empapado soy yo...

...vistiendo la misma saya de paño de lana azul que, en esta otra foto, tengo en las manos. (¡Qué feo me pongo cuando me mojo, y menos mal que he adelgazado bastante!)

2.- La intensa actividad del blog, que no deja de aumentar y de aumentar, lo mantiene siempre joven y atractivo, con nuevos y refrescantes artículos.

Pueeees... pues va a ser que no. Porque si, a lo largo del tercer año, hubo 33 entradas, hasta un acumulado total de 126, este año llevamos tan solo 28 entradas de nada. Y es que no voy a ponerme, a estas alturas, a explicar otra vez cómo se abomba un trozo de chapa; así que las entradas tienden a espaciarse un poco más. Que además me meto en unos fregaos de cierta magnitud; y si me paso tres semanas cosiendo una tontada indigna de ser enseñada, malamente tendré algo que contar.

Pretendo seguir con esa tendencia, porque empezaba a resultarme un poco estresante encontrar un tema del que escribir. Si hasta hace poco venía a haber una entrada nueva cada semana y media, pretendo reducir esa periodicidad a cosa de una entrada cada dos semanas y media, poco más o menos. O lo que me dé la gana en un momento dado, vamos. Sin compromiso. Lo que me pete. ¿Capisci?



3.- La diversificación, que no cesa.

Esta sí que es verdad. Este año, más en broma que en serio, lancé un blog alternativo con la fabricación de piezas modernas. Bueno, piezas modernas, piezas modernas... dos pares de alforjas para moto, por ahora (en breve, tendré que añadir otro par, y alguna otra tontería motera más)

¡Eh! ¡Y que el blog secundario tiene seis o siete visitas al día, y no todas son mías!



4.- Lo importante es el diseño

Los más observadores (y que no usen agregadores como Google Reader) se habrán dado cuenta de que la cabecera del blog ha cambiado, tanto en el subtítulo (y es que cada vez hay más material civil y menos armadureo) como, curiosamente, en una pequeña imagen de una espada y un martillo cruzados. A partir de ahora, voy a utilizar esa imagen como logo, e incluso, esquematizada, como marca de fabricación y/o propiedad. Así que, si en el próximo evento, alguien se encuentra una cuchara perdida, y tiene esa marca... que me busque, please.

¿Por qué ese logo, y no cualquier otra cosa? Pues, básicamente, por mi absoluta falta de imaginación y habilidad con el diseño gráfico. Y por otro motivo más que, por ahora, no voy a contar (enigmático y misterioso ¿verdad?)

Y ya que he sacado el tema... alguien que me siga por reader ¿me puede confirmar si cada vez que he publicado un cambio de diseño, ha aparecido como si hubiera un artículo nuevo, o si las nuevas entradas (que suelo republicar varias veces conforme cazo faltas de ortografía) aparecen también varias veces?

Vale, perdón, pierdo el hilo. Estábamos hablando del diseño del blog, y debo decir que también he actualizado los enlaces de la derecha (alguno se ha ido al trastero) y y debo destacar un enlace majísimo a una página que descubrió Polo hace nada, un buscador de recursos medievales realmente interesante.



5.- ¡Los artit-tas nos debemos a nuestro público!

Y es que las visitas siguen creciendo y creciendo. No es infrecuente alcanzar las trescientas visitas en un día, y la gráfica histórica sigue mostrando una clara tendencia al alza.


¿Y de dónde vienen esas visitas, quienes son, a qué se dedican?

Pues, según el Google Analytics que me instalé hace unos meses, algo más del 60% proceden de España, el 10% de Argentina, el 7% de Chile, y otro tanto de México.

El tiempo medio viendo la página en cada visita es de 3 minutos, y, curiosamente, es muy normal que la página a la que llegan las búsquedas sea la de "Dónde conseguir material" o la de "primeros pasos con la soldadura".

Lo cierto es que la inmensísima mayoría de los accesos desde buscadores van expresamente a por el blog, con las variantes ortográficas más variopintas de "blindado personal" y "axil", seguidas de cerca por las ya clásicas búsquedas sobre la malla o martillos. Pero vamos, que también hay alguna cosilla rara, así que me veo obligado a reeditar el


Consultorio de Axil para las visitas perdidas (iii)
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Imágenes increibles. Jo, el nuevo buscador Bing le sube a uno la moral. Esto lo he visto varias veces, aunque aún no he sido capaz de ver qué rayos imagen del blog aparece.

Trucos sacar alquitrán de la suela. Querido lector: tiene usted un problema. Es posible que salga con gasolina, o a golpe de cincel, pero yo que usted me iba haciendo a la idea de comprarme unos zapatos nuevos.

Cómo hacer para aprender soldar con pulso. ¡Ah, si yo lo supiera! Permítame darle un consejo: empiece por no tirar agua por el taller en el que va a soldar, que se puede resbalar, y además puede causar cortocircuitos.

Imágenes de nunca tirar agua en un taller de soldadura. Vamos a ver ¿qué acabo de decirle?

Video lesiones soldadura. ¡So morboso!

Trabajar en yelmo es una mierda. Hombre, es arduo, pero hay que tomárselo con filosofía. En el fondo, mola.

Concha tu madre quiero una cosa especifica necesito precios de herr... y hasta ahí me salió lo que estaba buscando este estresado lector. Querido amigo: dudo mucho que vaya usted a conseguir intimidar a Google empleando ese lenguaje; pero, si tiene a bien reformular la pregunta, estaré encantado de proporcionarle los precios que conozca de los/as "herr" que estén a mi alcance.

Supertronic. Mi muy querido amigo, sospecho que acaba de sintetizar en una sola palabra el título del magnífico vídeo que estaba buscando en realidad. ¡Viva Molvania!

Sobaco alisar. No alcanzo a aprehender las dimensiones de dolor físico que se esconden tras semejante acción. ¡Deje usted el sobaco a su aire, con sus arruguitas y sus pelánganos!

Cómo curar un botijo. Esa es muy fácil, preocupado lector: llévelo usted a un hospital para botijos.

Definición de nudico. Otra muy sencilla, simpático corresponsal: un nudico es un nudo, seguramente no muy grande, hecho por un maño.

Al Canfranc a varear fideos. Lamento comunicarle, querido amigo, que hasta ahora ignoraba que en la Jacetania se recogieran los fideos por vareo, como si fueran aceitunas de Jaén. La próxima vez que hable con don Lupercio, me aseguraré de que nos informe de la época más adecuada para presenciar la siega de los tallarines en tan noble comarca, para que no nos la perdamos.

Dónde me dan zapatos para coser en casa, que sea en Navarra. Pues mire usted, mi querido amigo: precisamente, tengo yo unas botas militares forradas de goretex que se están abriendo por una costura, y me encantaría que alguien me las cosiera en plan colegas. Se me ponga en contacto, por favor (vale, no soy de Navarra, pero Correos hace maravillas con la paquetería)

Pulido de colmillos de tigre. Querido lector: hay muchas formas de pulir los colmillos de un tigre, pero, todas ellas tienen un guión común: consígase un calmante de uso veterinario realmente fuerte. Aplíquese al tigre (preferiblemente desde lejos). Espérese a que se duerma el tigre. Compuébese que el tigre está dormido (a ser posible, con un palo largo). Púlanse los colmillos.

Cuando a una persona le sale todo mal. En ese caso, mi apreciado lector... no se ponga a pulirle los colmillos a un tigre ¿vale?

Cómo recoger el mercurio de un termómetro casualmente roto. No disimule, amigo mío. Usted es una de las personas a las que les sale todo mal, es evidente. No importa cómo recoja el mercurio, pero ¡asegúrese de que no hay un tigre cerca!

Flower Power. Me avergüenza reconocer que bastantes visitas llegan a mi blog con esa búsqueda. No sé, no sé, yo no lo veo claro.

Chiste isostático. Esta la he reservado para el final, porque confieso que me pone. ¡Chiste isostático! Si cuando empecé con el blog me hubieran dicho que la búsqueda "chiste isostático" llevaría a mi página, hubiera firmado con mi propia sangre.

Y hablando del tema, ahí va un chiste topológico:

- ¿Por qué cruzó la gallina la cinta de Moebius?

- ¡Para pasar al mismo lado!

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Ciutadilla 2010: Pitufando unas alpargatas ¡Piñaooo, piñaooo!

Este año, el evento de Ciutadilla ha estado marcado por algunos acontecimientos extraordinarios. Para empezar, que, por primera vez desde Febrero de 2009, he acudido al evento con un guante para cada mano; y no con dos guantes derechos, como ha sido mi costumbre a lo largo del último año y pico. Claro, que eso no tiene mucho mérito, visto que, al parecer, a los eventos de recreación nos llevamos media casa.

El recién estrenado Axilmobile, cargado con el equipaje de dos personas.

En Ciutadilla nos recibieron nuestros amigos de la OAN, que, junto con nuestros también amigos los M&Ms, nos ayudaron a plantar la tienda, no sin cachondearse de mi cuerda de medir la distancia correcta entre las piquetas.

Con un poco de ayuda de los amigos.

Y es que la tienda sobrevivió al pasado Peracense, pero no indemne: como bien descubrimos este año en Teruel, la tela había encogido bastante (pasar la noche derrumbada en aquel charco no le sentó nada bien) y no había forma de dejar la tela tensa. Así que, después de medir la planta de la tienda cuidadosamente (gracias, Fernando), y de enterrar los palos a base de azada hasta conseguir la adecuada tensión, he podido reajustar sutilmente los palos para la nueva altura de la tienda.

A grandes males, grandes sierras.

Este año, mi fiel escudero Lucas dijo no-sé-qué de probar unas alpargatas que quería llevarse al camino de Santiago; que lo de las suelas finas de cuero no iba a molar nada en un camino largo y abrupto, y los chanclos tenían que ser incómodos y resbaladizos. Así que nada, a empezar la jornada con un calzado que ni siquiera sabía cómo ponerme.

¿Y por dónde dices que entra el pie?

Pero ¿cómo son unas buenas alpargatas? Según un escrito de 1322, son así:

Ordenaren que les espardenyes sien ben feytes et sien de bon espart et que sien en cada espardenya XXVI punts et de sobre lo peu onze cordes et detràs al taló IIII cordes, et si en altra manera seran mal feytes et lo dit compliment de punts et de cordes no auran, perda les espardenyes et sien cremades les espardenyes mal feytes.
(Gracias, Coalheart)

Las alpargatas son, al principio, una sensación extraña. Quedan flojuchas, y son incómodas; hay que ajustarlas para que no se meneen. Pero no intentes ponerte a trastear con los complejos, complejísimos nudos de las tiras: haz caso de los consejos de una bailarina de sardana (gracias, Gemma) sobre cómo atarse las alpargatas.

Paso 1: te calzas la alpargata.

Paso 2: pasas las tiras sueltas, que salen del talón, por debajo de las tiras laterales de su lado opuesto.

Paso 3: las cruzas sobre el empeine, las pasas alrededor del tobillo y las atas, de forma que las tiras laterales queden lo bastante tensas para que la alpargata quede bien ajustada.

Lo de los calcetines queda feo ¿verdad? Pero es que, cuando la planta de tu calzado es de cuerda de esparto, o llevas calcetines, o llevas la planta del pie en carne viva.

Después de todo el día con ellas puestas, subiendo y bajando del castillo por un camino lleno de cascotes, siguen siendo cómodas. ¡Prueba superada, amigo Lucas, y demás peregrinos santiaguistas!

Lo cierto es que el día transcurrió un poco soso, sobre todo por la falta de bastantes amigos de grupos cuya presencia se echó de menos. Pero vamos, tuvo sus momentos.

Hubo mucho cachondeo con los caballetes de la mesa de Quinto, tal vez perfectamente históricos, pero, según se rumoreaba, no tan perfectamente estables.

G. siguió con los zapatos que empezó en Portalrubio. Yo terminé otro trabajo, que ya comentaré en próximas entradas.

El comienzo del desfile se demoró bastante, y la Orden del Acero Negro adquirió cierto aire de orden mendicante. ¿Una lismonita para un ex-leproso?


El comienzo del desfile, todo soso, en terreno llano.


Claro que acabó cuesta arriba y con escaleras, como mandan los cánones

¡Desde Mallorca, con un par de... días en barco, nos acompañó la recientemente creada y extraordinariamente activa Compañía del Podenco Blanco!

Hubo presentación de grupos, al estilo Ciutadilla

E incluso alguna refrescante sorpresa durante la presentación ¡Dadnos la soldada prometida, o la tomaremos por la fuerza!

Hubo música ¡¡Y no se cantó el 'Campanera'!! (Sí, efectivamente, eso es un laud. ¿A que molan los juguetitos de Frei Galcerán?)

Nuestro querido amigo Coalheart pasó el día con nosotros.

Hubo batalla, con sus correspondientes andanadas de flechas.

Y con su correspondiente intercambio de espadazos, del cual me retiré según empezaba, porque no me sentía del todo a gusto con cómo se planteaba la cosa, y la inseguridad no es buena compañera cuando la gente se está golpeando con barras metálicas.

Cortesía de Jumpinthefire, aquí dejo los vídeos de la batalla:

Parte 1

Parte 2

Parte 3

Parte 4

Hubo (una vez más, y es que yo parezco nuevo, que mira que me pasa todos los años) quemaduras por el sol.

Hubo abollones debidos a caídas accidentales del casco (nada que no se arregle con, exactamente, tres martillazos bien apuntados)

Pero, desde luego, lo mejor estaba por llegar. Y es que, esa misma noche, asistí a un acontecimiento histórico: ¡la refundación de la OAN!

Así que, en los próximos eventos de recreación, que a nadie le sorprenda ver una nueva tendencia ¡Los pitufos negros zapatistas ninjas power rangers! ¡Ñaca, piñaooo, piñaooo!

Todo empezó por esta foto ectoplasmática.

Pero puede acabar así de negro (¡Ñaca!)

O así de... de... ¡Que pitufe Zapata!

Es muy, pero que muy posible, que en la próxima algarada se vea algo así entre las filas de los más serios y documentados recreacionistas cantigueros


O entre los más salvajes recreacionistas almogávares, si es menester

En definitiva, unas jornadas tal vez algo más flojas que en anteriores ediciones, pero hay que reconocer que este año el puente de mayo no ha ayudado: otros años, los festivos nos han permitido pasar varios días allí, pero, en esta ocasión, han caído en sábado y domingo. Un asquito.

A ver quién me dice que esta imagen no es inspiradora.